La autoridad comunal destaca que sus colegios públicos no seleccionan, bordean los 300 puntos promedio en el Simce y han aumentado la matrícula.
por Michel Nahas - 04/08/2014 - 06:00
Un informe de Educación 2020 destacaba hace unos años que, a diferencia de la mayoría de las comunas del país, Las Condes registraba un aumento del 10% de su matrícula en un período de cuatro años, porcentaje que superaba, incluso, el incremento en el número de alumnos de los recintos subvencionados y particulares de la zona. Una singularidad que por estos días es el orgullo del alcalde Francisco de la Maza, quien destaca que sus colegios no sólo han mejorado en niveles de inclusión, sino también en materia de resultados, con promedios Simce que bordean los 300 puntos y sin procesos de selección, todo gracias, explica, a una particular “reforma educacional”.
Las Condes tiene una situación más privilegiada, eso es un factor a considerar de todas maneras...
Hemos resuelto nuestros problemas, pero no tenemos una situación privilegiada. Nuestro índice de vulnerabilidad también es muy alto, es más alto, incluso, que el promedio de los alumnos de Chile. Tenemos más de 50% de alumnos en nuestros colegios con subvención SEP, lo que obviamente indica que hay vulnerabilidad. Hablar de Las Condes en materia de alumnado es equivalente a hablar del promedio de las comunas en Chile.
¿Cómo se explica, entonces?
Hemos construido un diseño en función de la educación pública: nosotros no tenemos liceos, tenemos colegios, cuyo ingreso es a los cuatro años a prekínder y egreso en cuarto, a los 19 años, aproximadamente. Tenemos herramientas que hacen que esos niños, que ingresan a los cuatro años sin selección, puedan acceder de forma adecuada en la nivelación que se requiere por las diferencias que hay en el origen. Alrededor de un 40% de nuestra matrícula tiene severos problemas de aprendizaje, ahí creamos el Centro de Aprendizaje, capacitaciones y estímulos para los profesores.
¿Cuándo optaron por esa fórmula?
El año 2000, cuando asumí como alcalde, y básicamente por una razón de sentido común, cuando tú tienes que pagar un colegio, nadie opta por una enseñanza que termine en octavo básico. Todos buscamos colegios que tengan esta continuidad desde prekínder hasta cuarto medio, y obviamente el no tener esa condición en la educación pública es una desigualdad. En cinco años nosotros convertimos nuestros liceos y escuelas sólo en colegios, desde prekínder a cuarto medio.
¿Y cuál fue el cambio?
Eso produjo dos efectos inmediatos, primero aumentó la matrícula, porque la gente entendió que estaba poniendo a un hijo para que se educara en forma completa hasta que tuviera la mayoría de edad, lo que ya era un estímulo positivo. Y lo otro es que al juntar los establecimientos o darles continuidad tuvimos que contratar directores de mayor nivel y profesores de enseñanza media, que tienen una calificación mejor que los de enseñanza básica; nos dieron una exigencia en cada colegio, lo que produjo un efecto positivo en la necesidad de capacitar a nuestros profesores.
¿Cómo les ha ido en materia de resultados e inclusión?
Hemos ido en una tendencia al alza en los resultado, hoy simplemente, a modo de ejemplo, el Colegio Juan Pablo II, que tiene uno de los mayores índices de vulnerabilidad, tuvo niveles de prueba Simce de 295 puntos; el Leonardo da Vinci figura como uno de los tres mejores colegios de la región, eso en cuanto a indicadores. La meta de nosotros hace ocho años era tener 300 puntos promedio Simce, que es una forma de medir, y hoy estamos en 292 puntos promedio, lo que de alguna manera significa que lo que hemos hecho va en la dirección correcta. Hoy nuestros colegios tienen un alto nivel de reconocimiento en la comuna y se ve por dos razones: la demanda que tenemos y las evaluaciones que hacemos en la comunidad escolar, donde en promedio tenemos una evaluación positiva del 97%. También sabemos que el costo para generar la educación que tenemos en esta comuna es del orden de los $ 140 mil promedio, que es el doble de lo que reciben los municipios por subvención. Yo he sido partidario desde antes de que asumiera la Nueva Mayoría de que para mejorar la educación pública básica y media se necesitan más recursos, pero también es importante la capacidad de gestión de esos recursos.
¿Le inquieta cuando se habla de desmunicipalización?
Hablar de desmunicipalización, como si las municipales fueran el problema de la educación, creo que es un tremendo error. Nosotros vamos a defender el proceso educativo que tenemos, porque es bueno, creo que incluso sirve de piloto a nivel nacional, porque una cosa es decir y pensar que la educación pública sea gratuita, no se seleccione y sea de calidad. Nosotros lo hicimos, si hablamos de educación pública de calidad, Las Condes ya lo logró: no seleccionamos, es de calidad por los resultados y la evaluación de los padres, es inclusiva y hemos generado las herramientas que permiten que esa tendencia se vaya dando. Queremos competir con los colegios particulares pagados, esa es nuestra meta final, pero hasta ahora lo que hemos logrado es un ejemplo para el país.
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